Una petición políticamente incorrecta a la «Estrella de Belén»

El próximo 21 de diciembre, solsticio de invierno, se dará una alineación astronómica inusual entre Júpiter y Saturno. Un tipo de conjunción que no sucedía desde la Edad Media y que se considera la «Estrella de Belén«.

Curiosas las relaciones que se pueden establecer:

En la mitología griega y en la romana primitiva, Júpiter destrona a su padre Saturno, por su tiranía, quien a su vez había destronado al suyo, Urano, también por tirano… la historia que se repite y no solo en la mitología…

… actualmente el abuso de poder por personas que se creen o creían inmunes, impide un desarrollo sostenible de nuestra civilización, lleva a desigualdades, estas a un cambio de poder…. y se repite cada cierto tiempo. Un buen ejemplo es la primera mitad del siglo pasado, con la gripe española, el fin de muchas monarquías y la subida de populismos que nos llevaron a la Segunda Guerra Mundial.

Si nos centramos en España… Alfonso XIII, Guerra Civil, Franco, Juan Carlos I con la posibilidad que se está barajando de quitarle el título de rey

… para reflexionar y para dar un suspiro de alivio porque sus funciones evolucionan en la mitología romana posterior; Saturno pasa a ser el dios de la agricultura, mientras Júpiter, rey de dioses, adquiere funciones de «estadista» (por si aprendemos algo y sabemos también evolucionar).

¿Y qué decir de la tradición cristiana? Jesús «destrona» o hace evolucionar a Jehova, pasando (o queriendo pasar) de la ley del Talión a una ley que integre comprensión y empatía.

Volviendo al hilo del título, otros años he hecho mi petición a Santa o a los Reyes, pero con la pandemia que estamos sufriendo, siendo este 21 de diciembre tan ¿mitológico?, se lo voy a pedir a la «Estrella de Belén».

En relación a por qué es políticamente incorrecta…

Mi primer impulso fue pedir un virus o una bacteria que se sintiera atraída por la química que provoca una Inteligencia Emocional subdesarrollada. Mi segundo, tras saber de la nueva mutación del COVID que se ha dado en Inglaterra… mejor que un nuevo virus, aprovechar este (que ya nos tiene a medio mundo confinado), que consiga la mutación exacta para poder regularnos de forma equilibrada y sostenible.

Desde mi perspectiva necesitamos depredadores que nos regulen y, hoy por hoy, con menor coste para la Tierra que las guerras, los únicos depredadores no humanos que tenemos como especie son bacterias y virus nuevos o mutantes ¿algo más?

¿Cuál es la función de los depredadores? Cruda y llanamente mejorar o, como dice en este artículo del ABC, garantizar la sostenibilidad de la especie: El hombre, un «superpredador» insostenible

Si la evolución implica mejora para la vida (lo que no se adapta se extingue) y la vida en la tierra se rige por este principio…. la especie humana estamos en serio peligro. Hemos desarrollado una civilización tóxica, basada en la ley del más fuerte, por la cual estamos acabando con recursos, flora, fauna, salud, bienestar… y llegando a una situación que va de mal en peor con fenómenos meteorológicos cada vez más raros, más extremos y más frecuentes, lo mismo que las epidemias que antes eran locales ahora son pandemias globales o a una tensión y polarización creciente…

Os recomiendo el artículo Por qué estamos tan polarizados en El País. Lo explica desde un punto de vista científico, si bien, desde mi perspectiva le falta el complemento «humanista» que aporte soluciones desde la Inteligencia Emocional, más que desde la filosofía moral como apunta el autor, Pablo Rodríguez Palenzuela, Catedrático de Biología Molecular en la Universidad Politécnica de Madrid.

La única solución viable para dar un giro de 180º que nos posibilite transformarnos en una sociedad sostenible, hoy por hoy, creo que solo sería posible con un milagro (quienes me conocéis sabéis que mi definición de estos es: ciencia por descubrir), por ejemplo, que el COVID mutara, se viera atraído por el tipo de química que desprenden quienes son directamente responsables de lo que está sucediendo en cuanto a consumismo, hambre, paro, guerras, adicciones, corrupción, especulación, idiocracia… (comportamientos habitualmente asociados a un pobre o mal desarrollo de la Inteligencia Emocional) y pusiera las pilas o ayudara a limpiar nuestra especie de especímenes tóxicos.

Mi madre dice que estamos viviendo el apocalipsis (el hambre, la peste, la guerra y la muerte). Yo también creo que estamos en un momento crítico evolutivo en el que esto va a ir de mal en peor, a no ser que desarrollemos nuestra Inteligencia Emocional colectiva urgentemente.

Y desarrollarla no es saber qué es Inteligencia Emocional, conlleva desarrollar patrones sanos de pensamiento y acción que nos ayuden a gestionar nuestras emociones y faciliten interacciones «sostenibles».

La IE no se compra con un título, su desarrollo implica práctica e impacta en todos los niveles, incluida la salud (a «mejor química» emocional, mejor sistema auto-inmune).

Personalmente me parecería un magnífico regalo de Solsticio de la Estrella de Belén, elevar nuestro nivel colectivo de Inteligencia Emocional.

Gracias por leer y compartir.

¡Feliz solsticio, Felices Fiestas y Felices Reyes!


Autora: Mercedes Hortelano. Asesoría, consultoría y capacitación en desarrollo profesional y estratégico. Especializada en diagnosis, técnicas de desarrollo, sesiones de realimentación (feedback) y de entrenamiento en competencias transversales. Especializándome en estrategias sostenibles.

Si tienes alguna pregunta o te interesa profundizar en algún tema, te invito a contactar.

Si en algún momento quieres saber cuál es tu nivel de desarrollo de las competencias raíz, base del resto de competencias o habilidades blandas, te invito a realizar un breve test que te ayude a conocer el proceso de desarrollo de las competencias base de la IE e identificar tu nivel.

Y si quieres un buen regalo (de Navidad) o de Reyes, compleméntalo (el test) con una videoconferencia de realimentación o feedback.

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